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Ruta de los Pioneros

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{{distancia y desnivel|11,2|480|530}}
Una vez cruzado el río se debe ascender en busca del sendero que se reconoce sobre la ladera justo por debajo de la línea de árboles. Una vez en el bosque (km 19,2), existe una hormosa hermosa terraza con pasto que resulta un excelente campamento en caso de venir desde el sur y querer cruzar temprano el Paso La Picota. La huella cruza los pastizales y asciende el bosque para en el kilómetro 19,7 cruzar la línea superior de vegetación. Destaca a las espaldas un gran glaciar bajando del Cerro "T". La huella baja a una planicie de arenas y rocas debiendo poner atención a las pircas, pues la huella en algunos sectores se encuentra algo borrada. Al finalizar esta planicie la huella tuerce levemente al suroeste y asciende por las laderas de forma bastante rectilínea para alcanzar en el kilómetro 22 un paso ubicado a 1.300 msnm. Se observa desde este punto un valle que fluye hacia el este. Se deberá bajar a él,, siendo más sencillo realizarlo remontando un poco el valle y luego bajar siguiendo el curso de agua en el fondo. El valle se enancha y vuelve más plano antes de llegar a una laguna. Se debe alcanzar el final de la laguna por cualquiera de sus costados (preferiblemente el oeste), pues al terminar se reconocen algunas pircas que indican nuevamente la huella en dirección a un segundo portezuelo fácilmente reconocible. A este paso se llega en el kilómetro 24,5 y posee 1.230 msnm (en track indicado como paso 1200).
26 tributarios
* Los pobladores agradecerán enormemente cualquier presente que se les pueda llevar. Por ejemplo Don Heraldo Rial es un ávido fumador de tabaco. Se alegrará enormemente si se le lleva unos gramos de tabaco y papelillos.
* Llévese su basura y la que encuentre. Nadie más lo hará por usted.
* El Lago Alegre posee excelente pesca. Se recomienda llevar lienza y anzuelo. No olvide conocer y aplicar la ley de pesca.
* Evite hacer fuego. En caso de ser necesario, extreme las precauciones debido a los fuertes vientos y abundante materia vegetal. Los bosque de estos apartados valles aún se han salvado de los incendios. No sea usted el que los queme!